Descripción Iconográfica y Artística:
Imagen de Ntra. Señora de las Angustias.

Talla en madera policromada con carnaciones a medio pulimento, de tamaño algo inferior al natural.

Obra de gran valor expresivo, figura a la madre, sentada sobre una peana, inclinada sobre el flácido cuerpo de su hijo que acaba de ser bajado de la cruz. María, de rasgos sumamente naturalistas, sobrecoge por la atroz tristeza que deja entrever en su llanto apenas contenido. Viste túnica rosada, manto azul, y cubre su cabeza con una túnica rayada que se riza sobre el hombro derecho, asomando dos guedejas de pelo a los lados de la cabeza. Los pliegues del vestido, bien dispuestos, huyen de cualquier efectismo. Tan solo la moña de la toca hace alguna concesión a lo «superfluo».

Cristo descansa la parte superior del torso en la rodilla izquierda de María. La cabeza esta sujeta con crispación por la mano de la Virgen, mientras que el resto del cuerpo se desploma marcando un violento escorzo. Las piernas están flexionadas y vueltas atrás.

Llama la atención que Jesús tenga traspasado el costado izquierdo en lugar del derecho.
La imagen, lleva la siguiente inscripción en la peana: «Antonius Calbo fecit Mari ¿? Año 803». Desgraciadamente hasta ahora poco se sabe del artista que parece firmar la obra. La abreviatura «Mari» resulta confusa, aunque bien pudiera querer decir «Madrid», lo que no desencajaría con la tesis que mantenemos a partir de la afirmación de José Ramón Melida acerca del parentesco entre esta obra y el estilo de Luis Salvador Carmona. En Efecto, la imagen recuerda mucho a la Piedad del Oratorio del Olivar de Madrid, y a la de la Catedral de Salamanca, obras ambas de Carmona. Esto hace pensar en la posibilidad de que Antonio Calbo, fuese discípulo del académico en Madrid. Ahora bien, Calbo da a su obra una cierta dosis de barroquismo que la hace diferente a las de su presunto maestro, mucho más equilibradas.

La obra también se puede relacionar con los modelados que valieran a Juan Adán, el ser nombrado Académico de Mérito en 1774. Adán refleja influjos italianos, sin embargo en su imagen en barro de la Piedad, como la que fue destruida en 1936, venerada hasta entonces en la Catedral de Lérida, cercana a las Angustias de Fuente de Cantos por su esquema compositivo y hasta el tratamiento de los paños.
Nada mas podemos afirmar del supuesto entorno artístico de Antonio Calbo Lo que si hay que decir es que el grupo escultórico en cuestión está a la altura de Adán y de Carmona, aunque resulta menos clasicista pese a lo tardío de su realización.

El presente estudio histórico-iconográfico ha sido realizado a partir de las informaciones facilitadas por D. Juan Manuel Valverde Bellido, Licenciado en Historia del Arte Moderno y Contemporáneo y gran conocedor del Patrimonio Local de Fuente de Cantos.